Brillante.
A mí nomás se me ocurre ir al hogar común donde él permanece, interactuar fluidamente y sonreír incluso, y luego ir a ver a una pareja de amigos que acaban de ser padres.
Como si no fuera suficiente, después voy (el mismo día, si no digo yo...) al departamento de otra pareja de amigos que felices me cuentan que acaban de concretar la compra de una casa. Las fotografías pendientes del matrimonio, no las vi porque eso ya sería el colmo de los colmos.
Qué atroz dicotomía; soy muy feliz por ellos, de verdad y de corazón, y sin embargo me inunda una tristeza tan honda al ver cómo la vida de los demás sigue su camino mientras de la mía quedan apenitas unos escombros...
1 comentario:
Me alegra volver a leerte, amiga, aunque expresas tristeza. Te siento triste y tus motivos tendrás. Seguro. Pero procura mirar a la luna, al cielo y a las estrellas porque en ellas se esconden tus ilusiones. Esas que volverán a hacerte sonreír. Tu felicidad está ahí, tan cerca tuya que ni la sientes.
Besos como soles.
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